El mejor amigo del runner es su reloj. En los entrenos es importante controlar los tiempos, ritmo cardiaco y distancia si se aspira a participar en la famosa maratón de NYC.
Garmin, uno de los líderes mundiales en sistemas de navegación comunes, ya tenía su público en el mundo del running con los dispositivos Forerunner 110, 210 y 405. El nuevo Forerunner 610 es una evolución de estos primeros modelos, más sofisticado, rápido y eficaz.
Registra el ritmo, velocidad, distancia recorrida, y con el sensor cardiaco opcional puede registrar y monitorizar el ritmo cardiaco, y avisar si se dispara o baja en exceso mediante alertas vibratorias, muy útiles cuando el ipod nos evade del mundo exterior.
El reloj se caracteriza también por su display táctil, resistente a condiciones meteorológicas adversas como la lluvia. Es mucho más sencillo interactuar con la unidad, e incorpora muchas más opciones que sus predecesores. Otro modelo que me parecía buena opción era el Forerunner 405, pero lo descarto porque la sensibilidad del bisel táctil deja mucho que desear.
Totalmente personalizable, el Garmin Forerunner 610 tiene muchos tipos de programas de entrenamiento y permite volcar la información obtenida de las sesiones a un ordenador de manera inalámbrica automáticamente cuando el reloj se encuentra cerca del ordenador, para analizarla más tarde en Garmin Connect.
Es por lo que tras varios años gastando zapatillas en el asfalto, y con objetivos más ambiciosos en el mundo del running, ha llegado el momento de mejorar en los entrenamientos y alcanzar otras metas.
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