Un pulsómetro en la muñeca de un corredor es imprescindible para analizar los cambios en los entrenamientos y registrar todos los detalles. Con el objetivo (por ahora intención) de correr la maratón de NYC en el 2012 me he decantado por el Garmin Forerunner 610. Y una vez que lo he probado posteo para dar mi opinión, propósito nada fácil porque no sé por dónde empezar a disparar mis alabanzas.
La pantalla táctil de la unidad 610 es resistente, funcional y muy sensible, lo que facilita mucho su manejo en el running. Visibilidad perfecta y ningún problema para desplazarse por las diferentes pantallas y opciones que ofrece el FR. Configurables todas las funciones, pantallas, alarmas y todo lo necesario para poder adaptarlo a nuestros entrenamientos. Vibración potente en la muñeca, muy útil para marcar alarmas de frecuencia cardíaca, distancia, tiempo, calorías quemadas o velocidad, según nuestras preferencias. Sencillez en el manejo y un excelente software. Vamos, que podría llevar el apellido de la compañía manzanera de Cupertino por la facilidad de manejo y lo atractivo de la unidad.Y si muchas son las bondades del FR 610, más fascinación rinde su software para almacenar y analizar los datos de la carrera. Mil posibilidades y gráficas para el seguimiento de nuestras sesiones de entrenamiento, fáciles de exportar ¡y en español!. También ofrece la posibilidad de programar sesiones e importarlas al dispositivo.
Lo mires, por donde lo mires...no le encuentro fallos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario